Inquietan las palabras cuando claman,
sulfuradas, piden embravecidas
y opinando difaman convencidas,
soberbias y seguras nos reclaman.
Duele y mucho escuchar a los que se aman...
Traficar agudas acometidas;
sin saber qué nos pasa en nuestras vidas
y alteran sinrazón por lo que traman.
Sensatos vigilamos transparencia
y de acciones ajenas ni conoces,
por qué debo explicar de mi cordura,
la que entretiene útil indulgencia
si añaden dolor de alma con 'los roces',
si no sirven de ayuda en desventura.
¡Ay de la triste usura,
Elisa en: "Don Anselmo"
Feb/2011
sulfuradas, piden embravecidas
y opinando difaman convencidas,
soberbias y seguras nos reclaman.
Duele y mucho escuchar a los que se aman...
Traficar agudas acometidas;
sin saber qué nos pasa en nuestras vidas
y alteran sinrazón por lo que traman.
Sensatos vigilamos transparencia
y de acciones ajenas ni conoces,
por qué debo explicar de mi cordura,
la que entretiene útil indulgencia
si añaden dolor de alma con 'los roces',
si no sirven de ayuda en desventura.
¡Ay de la triste usura,
si la memoria es lluvia, toca aldaba
y empapa la nobleza de su esclava!
Elisa en: "Don Anselmo"
Feb/2011
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