Algún gorjeo conmueve a la ternura

Las esperas significan unas nadas
dueñas a muerte de las esperanzas,
a veces sólo ellas acompañan
de magia natural algunos ratos
a tristes soledades compañeras.
¡Mujeres son, mujeres que no faltan
y las conocen sus sueños las chisteras
de esos magos que juegan con sus almas!

...
Si acaso me bosquejas con tus dedos
o tus labios pronuncian algún nombre,
es cuestión de volar...
Sí, volar por altas cumbres
y no difusa en el viento,
real y dilatada en el abrazo.
Mirando las laderas de los montes,
adentrada en los meandros de corrientes
donde el río ralentiza en mansas aguas.

No es necesario dejar un nombre
en la corteza de los árboles,
pero sí saber que anidaron esas aves
y quizás algún gorjeo conmueva a la ternura
suscitando caricias... y algún beso.

Por eso te encuentro en el paisaje
y no te digo nada, porque pienso
en los caminos lluviosos del recuerdo
caminando en la niebla y descalza
o danzando en el viento con tus alas,
empapada y desnuda entre la lluvia
imitando el movimiento de las ramas;
porque eso eres tú mi estrella pálida,
mirando desde el agua nuestro cielo
temerosa y callada ensoñación del alma
aquí donde aún te describen desde un suelo.

Elisa