A. Elisa Lattke V.
Este otoño mío
se lo he dejado al viento,
un hoja más que se desprende
confundiéndose en los ocres
de los tiempos.
Este ser interior aún se busca
en el fondo de otros ojos.
y ecucha dentro su gemir.
¡Eh, tú, Amor, que me sabes vencida
en el lecho de las horas!
Aún siento unos nudillos en la puerta
y veo avanzar un rostro hecho de agua,
para mi sed cautiva de su fuente.
Tus silencios y los míos
son el lenguaje del alma
y, en sus interludios, me derrota la vida.
Me veo en un espacio cerrado
en el concilio de mis pensamientos.
Te oigo en lo evocativo de las sombras
y me desnuda una plegaria.
Este ser interior se ha hecho mudo soliloquio,
para sentirte en la palabra.
Y esa, incluso se me niega.
Elisa
El otoño interior es más de temer que el exterior. Hermoso poema :)
ResponderEliminar¡Nos leemos!
Bonitos versos, y que descubro a través del blog de Julio.
ResponderEliminarUn beso.