Gotas de ancianidad

Somos como una invitación
para la dulce realidad de los anhelos,
un cúmulo de estrellas colgadas de un cometa.
Me maravilla la prodigalidad del pensamiento,
cuando las ideas hacen burbujas en un vaso...
Es como si quisiera ocultarse todo lo que se piensas
y corroborarlo con metafóricos detalles.

Esas pequeñas esferas efervescentes
se inhalan para sentirse vivo,
cabe lo que nos maravilla
de la unidad y su armonía.
Son gotas con sabor a sal.

Si acariciase una piedra
ella no dudaría ser blanda a mi ternura...
(Es un don de las hadas.)
No me tengas envidia,
tan sólo teme a ser un mal resultado si me imitas.
Las azules no siempre se descubren.

Por eso hoy me siento soñadora
y no quiero que me descalabre la realidad;
es que siempre hay una trinchera abierta
o una mirada apuntando desde cualquier lugar;
y los disparos a bocajarro espantan al temor.
Le pongo grilletes a tantas formas de ver la vida
que por eso hoy dejaré mis palabras sin alas...

Sé que anidan lontananzas y eclosionan.
Son esos sacudimientos con palabras y ellas regalan ideas.
¡Recoge lo que he anidado, es un regalo!


Elisa en: "Salambó"

*No pesa la mochila del sembrador si libera sus semillas.