Si obtienes la confianza nunca fallas
ni hay riesgo a quien conoce ya la vida;
buscando un buen concepto de salida
con alma y la razón y no te callas.
Un poco del latir porque entretiene
al cuerpo reclamando su armonía,
por ver quien lo demanda al mediodía
sirviendo por amor a su Selene.
Los cielos son los logros más ansiados,
y más altos que cumbres de la tierra;
y yo por cada vuelo lo sostengo.
Los quiero por alturas alabados...
Me saben ruiseñor porque me encierra
la jaula corazón de su abolengo.
A. Elisa lattke V en: "El Ruiseñor"
Aquí reúno mis pensamientos con alas. Una visión de mi yo y como veo la vida alrededor de mi ser, llenándola de mi creatividad, recuerdos e inquietudes. Es un espacio físico para mi espiritualidad. Un lugar de 'remojo' para una inquieta "ranita azul" (mi mote), entre la maraña del bosque de mis ideas y la charca mental, donde permanece lo que refleja la luna en las charca. ¡Gracias familiares, amigos, conocidos y no conocidos por su visita!
Amigos, familia y conocidos
viernes, 1 de noviembre de 2013
El norte espera
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Que el vuelo del ruiseñor siga siempre el norte.
ResponderEliminarUn abrazo.
Un buen poema, Elisa. Besos.
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