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domingo, 3 de noviembre de 2013

Vesear de ranas azules


¡Ay, de quien a mí me quiere
y por verme ya me siente,
se acomoda en su marisma
y anida amor y no miente!
Sé que la vida entristece
si no hay caricias ni besos,
sabe quien se los regala
entre plegarias y rezos.
¡Ay de quien vuela en ideas
alondra de los juncales;
ay de sus vuelos bien altos
sin descuidar sus azares!
Porque quien sabe querer
sabe también de quien sueña...
Sabe quien vuela con alma
y se esconde por la niebla.
¡Y por quererme me siente
y por sentirme padece;
ay quien mira a sus cielos
y en la tierra me enloquece!
Quiere su vida tranquila
libre de penas de amores,
pero me quiere contenta
porque entiende mis favores.
...
¡Ay del amor que estremece
ay del amor que no miente!

(alv)

1 comentario:

  1. Precioso. Merece la pena leerlo varias veces para penetrar más profundamente en su contenido.
    Un abrazo.

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