Pequeñas y grandes cosas veo cuando me siento aquí delante.
Y sé que hay una isla de pensamientos y todos pueden ser importantes.
Unen o separan lo preciso. Me leen y nos leemos. A veces solo miramos sin decir nada.
Y, mientras se observa, descubres que pensar, es entrar en lugares desconocidos sin ser invitado. -No me pregunten cuáles- 
Foto: *alattkeva
Me gusta el silencio y me gustaría que estuviese a mi lado. Lo veo como un señor alto, serio y vestido de gris con sombrero. Igual que un inspector de Hacienda, porque en este zaguán social se improvisan realidades y la noche se arrulla sola. Pero él está allí para ver quién  engaña y vende ideas o trafica con ellas.
¡Ven, siéntate conmigo, hermana Luna, veamos juntas pasar el tiempo sin hacer preguntas a tantas vidas! 
Tú allí en las alturas ves mejor  todo este mundo.
Sólo podemos ver las apariencias, ¡sí las apariencias sin corazones! 
Son como la metafísica: están y estás, eres algo, pero sólo ves una parte de un todo y soy algo más, pero incompleto. Mi espíritu errante carga conmigo. Y, Soy de las cosas que nos sugieren mientras pasamos. Corriente de luz desplazándose... Disfrutemos de nuestra verdad interior, abramos los ojos a la terrible ternura que nos rodea, ¡porque es todo un universo! Con su silencio abrumador y palpitante, hecho del aroma de los astros. ¡Allí somos un Todo!
alattkeVa-2020 .
 
 
Del silencio nace el pensamiento con los latidos del corazón.
ResponderEliminarUn abrazo y feliz domingo.