Mi Señor Jardinero

Mi Señor Jardinero: 


Sé que en algún lugar de la vida se cruzan nuestras almas, como en este oscuro bosque del mundo lanzadera. Por algún lado busco esperando hallar un beneficio acorde con mi realidad. Vivir en el amor y para el amor… ¿No hay mayor felicidad? Sé que sabes de mí porque no soy del grueso de los mortales. Razono tal como esperabas. No me contento con lo que sé, porque quiero saber todo y cómo y dónde está la verdad, porque soy uno más en el reflejo de los espejos. 


¡Cuenta conmigo para volver cuantas veces lo necesite! Por sentir que somos parte de lo Divino pero me sé inconcluso, torpe, vacío, ... ¡y tengo miedo! Aún me siento del barro entre tus manos. Sé que me acaricias con ellas a través de los otros que me aman, me pules el presente, me alientas y consuelas. 


Estancias temporales, tomas de conciencia, flujos interiores, anhelos del ser, pedazos de algún lado, fichas que encajan de alguna forma; y somos de otra realidad que nos contiene... ¡Los elegidos para la vida, estamos aquí!


 Pero ahí fuera de nosotros, capa sobre capa en el concierto de las esferas, sé es e intuyo, que ya sabes de mí y por lo tanto me sé brote de cultivo.


 ¡Si quiero luz buscaré, me abriré paso hacia las estrellas!
Sé que los más fuertes alcanzarán la verdadera. Y si la fe alimenta y el amor abraza, conoceré quién soy para saberme eterno. Aún soy parte de ti, Señor, ¡gracias! Cuenta conmigo mientras sepa darte un sueño y tú... ¡regálame el mío! 




Elisa: en "Salambó"

 Julio-2006