No es difícil dejarse acariciar
por la brisa en sucesión de alegrías
más allá del tiempo convencional,
sin substraerse al desengaño
por la costumbre de percibir
su medida , el lugar de la apariencia
con sus claves que nos hablan.
El perfume del bosque, ajeno al yo
conociendo la sigilosa manecilla de las horas.
Los ciclos midiendo los cuerpos
y la luz de los horarios divinos.
No es difícil construirse murallas,
habitar espacios propios,
descolgarse de la mente
y columpiarse en la palabra.
No, no lo es.
Lo difícil es desprenderse del mundo
y saber que existimos en una micra
cubriendo la casual energía
con un gran caparazón de dudas.
No es difícil llorar al amor
sintiendo su profundo tic-tac,
mientras nos vamos
dejando de ser.
Elisa
por la brisa en sucesión de alegrías
más allá del tiempo convencional,
sin substraerse al desengaño
por la costumbre de percibir
su medida , el lugar de la apariencia
con sus claves que nos hablan.
El perfume del bosque, ajeno al yo
conociendo la sigilosa manecilla de las horas.
Los ciclos midiendo los cuerpos
y la luz de los horarios divinos.
No es difícil construirse murallas,
habitar espacios propios,
descolgarse de la mente
y columpiarse en la palabra.
No, no lo es.
Lo difícil es desprenderse del mundo
y saber que existimos en una micra
cubriendo la casual energía
con un gran caparazón de dudas.
No es difícil llorar al amor
sintiendo su profundo tic-tac,
mientras nos vamos
dejando de ser.
Elisa
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Gracias por tu visita.
Cualquier comentario que hagas aquí, se valora y ayuda a mejorar el contenido del blog, sobre todo al buen uso de la Lengua.
Puedes escribir a mi correo personal: auslava@yahoo.es