Chants Grégoriens moines abbaye de Solesmes (La energía silenciosa -Relato)

Los callejones de los pensamientos siempre tienen enredaderas donde florecen las ideas, por eso las ranas suben a ellas cuando las madrugadas se llenan de rocío del alma, allí croan a Selene. Creen hallar un camino más corto a las estrellas.

(Este relato lo sugirió lo que estáis escuchando...)

Los hermanos (o, La energía silenciosa)

...

Dagor, no soñaba, sólo se proyectaba en el tiempo y acompañaba a su hermano que aún no entendía lo que le estaba pasando, lo que le rodeaba en aquel lugar mágico, y prefirió que lo supiese antes de volver a casa:

"Dug, oye lo que te voy a decir y no lo olvides:

Me he dado cuenta que por momentos cuando razonas la vida de este mundo y lo haces de forma racional, cuando estás en ella, parece que el tiempo de cada ser humano, en este caso el tuyo y el mío de este ahora, es el mismo y se convierte en puerta hacia la antimateria, pero se ignora cómo entrar o cómo descubrir lo que hay detrás de ella; mejor te lo puedo decir: curiosear para hallar 'sus llaves' que por algún lugar de los propios pensamientos deben estar guardadas; porque ellos son nuestra energía y nunca se mueren y dentro de ellos tenemos las claves. Entonces, descubres como ir y volver sin perder la propia historia del presente.

 -¡Dug, es como habitar en cada partícula y ser un estallido interior en el momento de la muerte, porque las ideas se colapsan al romperse la vida y se dispersan llevándonos a todas las partes deseadas y no se siente dolor; tampoco se pierde el sentido de lo humano cuando lo has sido ni de la propia existencia si no lo deseas... ¡Míralo en esos apuntes que hallamos en la ermita abandonada! Allí decía que... "sólo eres masa por magnetismo a la misma atracción que la genera, que ella es lo que nos hace tangibles a los sentidos de los otros, porque lo sugiere la química del cerebro, y que es ella la que suscita la respuesta de lo que percibimos si queremos que así sea... Que todo es cuestión de fe pero esta ha sido impuesta a una parte de los seres humanos, mientras hay otra parte de nosotros que intenta comprender el por qué se tiene, es con la que debemos luchar para conseguir las llaves de las dudas"... "Me ha hecho mucho bien leer esos viejos manuscritos antes de que pasara aquello..., ya sabes... Quiero saber si tú has asumido lo ocurrido."

"Dame tu mano y mírame a los ojos, sólo mírame mientras los cierras y siente mis manos en la tuya, es una prueba de la acción telúrica, su fuerza en este presente donde estamos, hermano; ahora ábrelos y llévate esa misma mano que aprieto a tu pecho y escucha el latir de tu corazón... ¿Dime dónde crees que estás?, porque yo he dejado de ser hace dos días al caerme por el barranco y tú sigues creyendo que estoy... ¡Y lo estoy porque tengo que llevarte de nuevo a casa y así se lo prometí a nuestros padres!... Temes que no sea verdad, lo sé; por eso mientras andamos apenas me miras y vas por delante de mí, aún no puedes creer lo que ha pasado. Es posible que aún no lo entiendas pero ahora yo sostengo tu deseo de volver cuanto antes y sigue siendo el mismo, te repito, se lo prometí a nuestros padres; allí radica la fuerza del espíritu que nos inunda a los dos, su fuerza es el misterio del que te hablo, hermano; ¡no estamos solos por el mundo! Pero no digas nada ni me respondas porque entonces perderás el contacto de mis manos en el latido de un mismo corazón que te protege. Si así se cumple no seré parte de la tierra y sí del amor de los que nos esperan. Sigue mis pasos y hallarás el camino de vuelta..."

Elisa