se iluminan de estrellas murmurantes,
y una rana se dormirá sobre un loto... *alv
Aún me ocupo de mí y eso es bueno;
y duermo entre recuerdos de hojas escritas.
En el marco de las sombras dibujadas,
hay un rescoldo de un verbo que se agota
y al final se queda una estrofa sorprendida.
Me escondo para atrapar cualquier ilusión,
pero siempre son los ajenas que dominan.
Y en un tumulto de versos despistados,
que quisieron volar buscando un sueño;
¡no saben aún que nunca fueron los que quise,
porque no sirvierón jamás para una nada!
Las hondas penumbras describen mi melancolía
y ya calculan los cielos, mis aciertos y errores,
levantando una hojarasca de silencios al estío
y se atreven a que desdeñe ciertos lugares.
¡Y siendo fiel prisionera del ayer en mis palabras,
va y me despierta cada cierto tiempo la vida!
Para volver a perderme en los hexagramas de mis huellas
donde dejara mil promesas por un cielo...
Me delata mi alma en soledad
donde el cuerpo se marchita sin consuelo;
y me asiste una larga conferencia de reclamos,
donde giro y giro en la tolva de los siglos ya vividos,
agitando indiferencias al invierno.
alattkeva
Lo importante es seguir con ilusión la vida y el día a día, no lo dudes.
ResponderEliminarUn abrazo.
Se intenta cumplir conese proyecto de vida que parece que se olvida al venir al mundo. Necesitamos demostrarnos que sí fuimos capaces con el cuerpo animado por el Espíritu y con esa silenciosa amiga que toma nota, el alma, servir a quien no da lo mejor de su ser para que sepamos de él como Esencia. No creo que quien olvida a Dios se crea que es algo más, sino un triste barro sin futuro y sin amor.
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