Desde mi 'Charca Mágica'

Yo misma me gusto
por ser como soy;
haciendo poemas,
a todos les doy:

Hechizos de charca
de juncos y lotos,
cantares del agua
y mis versos rotos.

Ayer, la tristeza,
durmió por mi pecho;
supe de una estrella,
que dejó mi techo.

Desolada y triste,
recordé mi magia
y salté en el agua
cambiando a nostalgia.

¡Se nos va la vida!
Se nos pierde todo
por esos caminos
se agacha hasta el lomo.

Y te vas por ellos
buscando una estrella,
dormida en los juncos
y Dios junto a ella.

De la mano al codo
hay poca distancia,
pero si lo entiendes
suspiras con ansia.

¡Les das una mano
y se van al codo...
Les das la confianza
y se pierde todo!

Estas como siempre,
y con Dios al lado;
y buscamos más...
de un cielo, colgados!
...

Se va por la vida
y con ella a cuestas,
y aún siendo poca,
¡con ella te acuestas!

¡A veces es tanto....
que no ves el todo,
del tanto que llevas
que pasas del codo!

Y aunque vivas mucho
o, acaso un poquito,
el amor se queja
hablando bajito.

Cuando no lo ven
lo ves colorado,
intentado ser
el codo de al lado...

Para que no oigas
al "libre albedrío",
te cubren sonrojos
con hielo 'bien frío'.

Y piensas que abrazas
al tiempo encarnado,
que invita a dormir
de un sueño colgado.

Que te abrazas solo
y sólo a ti mismo,
con ganas de amarte hasta el reumatismo

Sientes soledad,
ausencia de todo,
da melancolía...
¡Te coges del codo!

Igual que si enfermas,
creyendo que mueres;
y un pañuelo sacas
por si acaso hiede.

Es surrealista,
parece de guasa,
y si lo disfrutas
del codo no pasa.

Por eso consigo
reírme con ganas,
mientras cojo el codo,
¡me salta la rana!

Desde ''La Charca Mágica"